Cuidar la forma como nos dirigimos a los niños debería ser una prioridad para todos los adultos.
A los niños, para que crezcan con una alta autoestima y seguros de sí mismos, tenemos que tratarles desde el respeto y la sinceridad.
Respeto a sus particularidades y sus ritmos evolutivos, para que puedan desarrollar plenamente todos sus potenciales.
Sinceridad, para establecer una relación honesta con ellos. Un vínculo libre de manipulación, imposiciones o amenazas, en el que nuestro único interés sea el de cuidar del bienestar de todos los miembros de nuestra familia.
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De esta forma, sin estar condicionados por amenazas, chantajes o manipulaciones, nuestros hijos podrán crecer creyendo en ellos mismos. Además, desarrollarán una una alta autoestima y se crearán una autoimagen positiva.
Nuestros hijos no dependerán de juicios externos para comprender su valía.
CÓMO HABLAR CON NUESTROS HIJOS
🔴 Desde el 𝐫𝐞𝐬𝐩𝐞𝐭𝐨 𝐲 𝐬𝐢𝐧𝐜𝐞𝐫𝐢𝐝𝐚𝐝. Sin gritos, sin insultos, sin chantajes, sin coacciones.
🔴 Respetando sus 𝐩𝐚𝐫𝐭𝐢𝐜𝐮𝐥𝐚𝐫𝐢𝐝𝐚𝐝𝐞𝐬 𝐲 𝐬𝐮𝐬 propios 𝐫𝐢𝐭𝐦𝐨𝐬. Sin forzar, sin presionar, sin amenazas.
🔴 Sinceridad para establecer una 𝐫𝐞𝐥𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐡𝐨𝐧𝐞𝐬𝐭𝐚. Sin premios, sin castigos, sin mercadear con nuestro amor.
Ramón Soler, Psicólogo
